A la hora de escoger naturalidad, calidez y confort para el suelo de la casa, nada mejor que la madera.  La oferta de variedades, diseños y formatos está siempre en constante evolución, tratando de responder en cada momento a los gustos estéticos imperantes.  En la actualidad la tendencia predominante son los “suelos vivos”, en los que, bien de modo natural o a través de procesos mecánicos o químicos, se producen superficies que muestran el aparente paso del tiempo.  Los nuevos diseños lucen especialmente en los suelos de gran formato.

El tradicional parquet de tres lamas ha quedado relegado como una alternativa meramente económica.  Para los ambientes contemporáneos, se imponen los pavimentos de una sola lama, con tablas cuya anchura oscila entre los 14 y los 45 cm. y con longitudes que alcanzan los 5 metros.

La elección del ancho de la tabla viene determinada por el espacio disponible.  No es lo mismo una típica vivienda urbana, con estancias reducidas y una iluminación natural a veces limitada, que una casa unifamiliar espaciosa y en un entorno despejado.  Para que un suelo de madera con tablas de gran formato pueda lucir, se requiere perspectiva y abundante luz natural.  Por eso, en el caso de una vivienda urbana es aconsejable instalar pavimentos con lamas que no superen los 15 cm. de ancho.

Los formatos, sin embargo, no tienen por que ser homogéneos.  De hecho, los suelos con tablas asimétricas son otra tendencia actual, sobre todo cuando se trabaja desde un planteamiento artesanal e individualizado para cada cliente.  Al extraer las tablas directamente del árbol, éstas presentan de forma natural diversos anchos.  Esta asimetría proporciona a los suelos una gran personalidad, pero si se desea, las tablas más estrechas se pueden ubicar en zonas poco iluminadas u ocultas por el mobiliario.

Entre los diferentes tipos de maderas, el roble sigue siendo el más elegido.  Su grado de dureza y relativa facilidad de obtención sitúan a esta variedad a la cabeza de los suelos de madera.  Además con  las modernas técnicas de pigmentación el roble se puede teñir de cualquier color, imitando la tonalidad de cualquier otra madera.

(Roble natural 1 lama)

(Vivienda en Santa Faz)

Otras variedades comúnmente utilizadas son el haya y el arce, y la teca y la jatoba como maderas exóticas.

La mayoría de pavimentos de madera que se instalan son del tipo multicapa, que tienen una capa superficial de madera natural, con un grosor aproximado de 4 mm, que se asienta sobre otra capa formada por lamas de madera de conífera o DM y una tercera capa de contraapoyo  también de chapa de conífera.

Menos utilizada es la tarima maciza, mas cálida y elegante, pero con un precio mucho mas elevado.

El sistema de colocación mas habitual para los suelos tipo parquet es el flotante.  Cada fabricante ha desarrollado su propio sistema de fijación de las lamas entre sí, pero en términos generales, éste se basa en perfiles machihembrados que encajan sin necesidad de cola.

Los suelos para exterior poseen características específicas, ya que soportan condiciones ambientales mas extremas que en el interior de la vivienda.  Las más exóticas, teca, iroco, ipé, etc. son opciones habituales, ya que poseen una gran dureza y su propio contenido en aceites naturales las hace especialmente resistentes a la intemperie.

En cuanto a los acabados superficiales de los pavimentos de madera, los barnices tradicionales brillantes han quedado en desuso y han sido sustituidos por los acabados encerados, al aceite o los barnices al agua con textura mate, que resaltan la apariencia natural de la madera, con sus relieves y dibujos de vetas.

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